Trabajar con camiones grúa en proyectos de construcción, montaje o transporte de cargas pesadas puede ser extremadamente eficaz si se cuenta con el equipo adecuado. Sin embargo, no siempre se toman las decisiones correctas a la hora de alquilar, planificar o ejecutar estas maniobras, lo que puede generar problemas con camiones grúa que afectan al desarrollo de la obra, generan costes adicionales o incluso comprometen la seguridad del personal.
Muchas de estas situaciones no se deben a fallos técnicos inevitables, sino a una mala elección del vehículo, una falta de mantenimiento, errores de comunicación entre los equipos o la ausencia de planificación previa. En este artículo repasamos los errores más habituales y te explicamos cómo evitarlos si estás organizando un trabajo en el que necesites utilizar una grúa sobre camión.
1. Elegir un camión grúa sin la capacidad necesaria
Uno de los problemas más comunes es subestimar el peso real de la carga o el alcance necesario. Cuando se elige un vehículo que no tiene la capacidad estructural o hidráulica suficiente para la tarea, se corre el riesgo de:
- Bloqueo de la operación por falta de fuerza o extensión.
- Desgaste prematuro del equipo por trabajar al límite de carga.
- Retrasos por tener que cambiar de vehículo a última hora.
Este problema se evita con una evaluación previa de las dimensiones, el peso real de la carga y la distancia desde la que se debe elevar. En Grúas Bretones te asesoramos para seleccionar el camión más adecuado según el tipo de estructura, acceso y altura de trabajo.
2. No verificar el estado técnico del equipo
En algunos servicios de alquiler, especialmente si el precio es demasiado bajo, los camiones grúa no siempre están en condiciones óptimas. El uso continuado sin mantenimiento, la falta de revisiones técnicas o el uso de componentes en mal estado pueden generar averías durante la operación que acaben bloqueando todo el trabajo.
Los problemas con camiones grúa por falta de mantenimiento incluyen:
- Fugas en el sistema hidráulico.
- Fallo de los estabilizadores o sensores de nivelación.
- Mandos poco precisos o con fallos eléctricos.
Por eso, alquilar siempre a una empresa que realice revisiones preventivas y entregue la documentación técnica del vehículo es fundamental para evitar imprevistos.
3. Mala coordinación en la zona de trabajo
El camión grúa requiere espacio para estabilizarse, elevar la carga y, en muchos casos, maniobrar alrededor de zonas con personal, maquinaria o estructuras en construcción. Cuando no existe coordinación entre el operador y el resto del equipo en obra, es habitual que se generen situaciones como:
- Accesos bloqueados por otros vehículos o materiales.
- Zonas de carga no señalizadas correctamente.
- Falta de personal de apoyo en tierra para guiar las maniobras.
Estos problemas no dependen del camión, sino de la falta de organización previa. En Grúas Bretones, antes de cada intervención, revisamos el entorno y coordinamos la maniobra con el jefe de obra o responsable de seguridad, lo que permite anticipar obstáculos y trabajar con fluidez.
4. No tener en cuenta el estado del terreno
La seguridad del camión grúa depende en gran parte de su correcta estabilización. Si el terreno es inestable, con pendiente o no está compactado, se puede producir un fallo de nivelación que ponga en riesgo toda la operación.
Entre los problemas con camiones grúa más peligrosos están:
- Hundimiento de estabilizadores en suelos blandos.
- Vuelco por despliegue inadecuado en pendiente.
- Desnivel excesivo entre ejes que impide elevar con seguridad.
Para evitar esto, debe valorarse siempre el tipo de terreno antes de fijar el punto de trabajo. En algunos casos, es necesario utilizar placas de reparto de carga o instalar el camión en otra posición. También puede ser necesario un modelo más ligero o compacto si el acceso es limitado.
5. Falta de operador cualificado
Un camión grúa no es solo una máquina potente: también es una herramienta que requiere precisión, experiencia y conocimiento técnico. En muchos de los problemas con camiones grúa que se producen en obra, la causa no está en el vehículo sino en la persona que lo maneja. Elevaciones bruscas, mala lectura de las tablas de carga, movimientos inseguros o falta de coordinación con el personal de tierra pueden provocar retrasos o incluso accidentes.
Un operador cualificado debe saber:
- Interpretar el entorno de trabajo y adaptar su posición.
- Elegir el ángulo y la altura óptima para la maniobra.
- Detectar comportamientos anómalos en la grúa y parar la operación si es necesario.
En Grúas Bretones todos nuestros camiones se alquilan siempre con conductor y operador certificados, con experiencia real en montaje de estructuras, maniobras en espacios reducidos y elevaciones complejas.
6. No calcular los tiempos reales de trabajo
Otro error frecuente es pensar que la operación con camión grúa se resuelve en pocos minutos. Aunque el equipo técnico sea rápido, hay tareas que requieren planificación y tiempo realista para:
- Preparar el terreno y señalizar el área de trabajo.
- Posicionar el camión y estabilizarlo correctamente.
- Revisar las condiciones del entorno antes de comenzar.
- Coordinar el montaje con otros oficios presentes en obra.
Al no calcular estos tiempos, muchas empresas se ven obligadas a extender el alquiler más de lo previsto o a dejar operaciones a medias, lo que complica la gestión del proyecto. Por eso, es preferible contar con asesoramiento previo y trabajar con una empresa que te ayude a planificar desde el principio.
7. No verificar la documentación del equipo
Uno de los problemas más graves, aunque menos visibles, es trabajar con equipos que no tienen su documentación técnica en regla. Esto puede suponer desde una multa durante una inspección de seguridad hasta un problema legal en caso de accidente.
La documentación mínima que debe acompañar a cualquier camión grúa es:
- Ficha técnica del vehículo.
- Seguro de responsabilidad civil.
- Certificados de mantenimiento actualizados.
- Inspecciones periódicas del sistema hidráulico.
- Certificación CE del sistema de elevación (especialmente si incluye canastilla para personas).
Cuando alquilas con Grúas Bretones, te entregamos toda la documentación necesaria para que puedas trabajar con tranquilidad, especialmente en obras públicas o intervenciones con requisitos técnicos estrictos.
Cómo evitar estos problemas desde el principio
Todos estos errores son evitables si se trabaja con una empresa que entiende las necesidades reales de la obra, tiene experiencia en campo y dispone de flota propia con equipos revisados. El servicio de alquiler de camiones grúa debe ofrecer mucho más que una máquina: debe aportar seguridad, conocimiento y respuesta rápida.
En Grúas Bretones llevamos más de 40 años trabajando en proyectos de construcción, obra civil, estructuras metálicas, instalaciones industriales y mantenimiento en altura. Conocemos los errores más frecuentes y sabemos cómo anticiparnos a ellos para que el trabajo no se detenga.
Ventajas de alquilar con Grúas Bretones
- Asesoramiento previo: analizamos el tipo de trabajo y te proponemos el camión más adecuado.
- Flota en perfecto estado: todos los vehículos están mantenidos y certificados.
- Operadores con experiencia: personal técnico con formación y conocimiento del entorno de obra.
- Flexibilidad: adaptamos el servicio a la duración real del proyecto y a sus fases.
- Cobertura en toda Córdoba y provincia: trabajamos en urbano, rural e industrial con la misma eficacia.
Si necesitas alquilar un camión grúa y quieres evitar sorpresas, interrupciones o problemas técnicos, cuéntanos qué necesitas y te ayudamos a resolverlo.
Solicita tu presupuesto sin compromiso y trabaja con la confianza de un equipo técnico que conoce cada detalle del servicio.

